Concurso 2026- Los jardines como espacios de libertad

El concepto de libertad ha sido interpretado a lo largo de la historia de diversas maneras, desde la autonomía individual hasta la conexión profunda con la naturaleza y el entorno. En el caso de los jardines, estos espacios verdes pueden verse no solo como lugares de descanso o de contemplación estética, sino también como verdaderos refugios de libertad, donde las normas, las limitaciones y las presiones sociales se disipan. Así, el Festival Internacional de Jardines de Allariz 2026, con su tema «Los jardines como espacios de libertad», nos invita a reflexionar sobre cómo los jardines, más allá de su función ornamental o paisajística, pueden convertirse en símbolos vivos de liberación y expresión.
Un jardín, en su forma más esencial, es un espacio abierto, donde la naturaleza florece sin las rígidas estructuras de la urbanización. En este contexto, el jardín representa un espacio de escape, un lugar en el que las reglas del mundo exterior no se aplican de la misma manera. Las plantas, los árboles, las flores, el agua y los caminos se combinan de una forma libre, sin las restricciones de los edificios, el tráfico o las imposiciones del entorno urbano. En este sentido, los jardines son un lugar donde la libertad se manifiesta en su forma más pura: la libertad de la naturaleza para crecer, desarrollarse y expresarse sin limitaciones.
Pero los jardines también ofrecen libertad a las personas. En un mundo cada vez más acelerado, los jardines son un refugio para la mente y el cuerpo, un espacio para desconectar del ruido y el estrés, para encontrarse a uno mismo en un entorno que no pide nada a cambio. La naturaleza, en su esplendor, ofrece una sensación de paz y serenidad que permite a los individuos vivir el presente, sin presiones, sin expectativas. En este sentido, los jardines se convierten en un espacio de autolibertad, donde podemos ser nosotros mismos y experimentar una conexión genuina con el entorno.
Además, los jardines también pueden ser un símbolo de liberación en el sentido ecológico y social. En un mundo marcado por la crisis climática y la pérdida de biodiversidad, los jardines se presentan como espacios de resistencia y regeneración. Permiten la libertad de la naturaleza para recuperar su equilibrio, ofreciendo hábitats para la fauna y fomentando la diversidad. Asimismo, los jardines comunitarios o urbanos son un ejemplo de cómo el espacio verde puede convertirse en un lugar de empoderamiento y cohesión social, donde las personas se liberan de la alienación urbana y se reconectan con su entorno natural.
El Festival Internacional de Jardines de Allariz 2026, al centrarse en «Los jardines como espacios de libertad», nos invita a imaginar y crear jardines que no solo sean bellos, sino que también representen la posibilidad de liberarse de las restricciones físicas, mentales y sociales. Es una oportunidad para explorar nuevas formas de relación con la naturaleza y con los demás, buscando un equilibrio entre lo natural, lo personal y lo colectivo.
En resumen, los jardines no son solo espacios de belleza, sino también de libertad. Libertad para crecer, para soñar, para ser. Y, al promover esta reflexión, el Festival de Allariz 2025 nos ofrece la oportunidad de repensar la relación entre el ser humano y su entorno natural, buscando, a través de los jardines, un camino hacia una mayor conexión, paz y libertad.