Jardín de Luz
Edición 2016 – Parcela 3
La globalización, a principios del siglo xxi, causó gran individualización en el comportamiento humano y gran masificación de las ciudades. Debido a la altura de los edificios y a la excesiva compactación constructiva, surgió la necesidad de un nuevo recurso que hasta ahora nunca había sido escaso: la luz del sol.
El calor de un encuentro entre amigos, una charla con un desconocido, dejar espacio a la espontaneidad, o tomar el sol y caminar descalzo sobre la hierba empezó a ser una necesidad terapéutica para vivir con buena salud física y psíquica.
El jardín de la luz es un espacio al que se pueden llevar las plantas para que tomen el sol y donde es posible relacionarse con personas aficionadas a la jardinería.
Un lugar de acogida para plantas abandonadas que se crea a través de ellas. Cuando pasa el tiempo y nadie las adopta, se plantan en el jardín. Así es como el jardín se va creando a sí mismo y va creciendo a través de un diseño dinámico, de respeto, en movimiento, un diseño que creamos todos cada día.
Los jardines sirven para seguir recordando que la naturaleza es el lugar de donde vinimos y hacia donde hemos de ir para aprender a ser humanos.
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Xabier Pageo
PROCEDENCIA: Barcelona
Sé qué busco y adónde voy, porque yo soy mi camino.
Nací entre el mar y la montaña y lo más importante: desde la montaña se ve el mar. La ecología y la diversión son la esencia de mi trabajo. Analizo e intento explorar el mundo para crear momentos de extrema belleza y singularidad capaces de acariciar el alma. Lo investigo; me investigo en lo más profundo de mi ser en busca de preguntas que me hagan compartir, que me acerquen a los tesoros que allí me aguardan y me hagan sentir parte de este maravilloso mundo.
Mis sueños y mi corazón añoran lugares en los que todavía no he estado. Pruebo y fallo, pruebo y fallo, pruebo y veo cómo se me revela una realidad, la realidad de un viaje.
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