El Cine, como siempre

Edición 2019 – Parcela 9  

El cine, a lo largo de su existencia, ha sido vinculado a un espacio concreto, que se ha mantenido, mayormente inalterado, desde la primera vez que se proyectó una imagen en movimiento ante una multitud. Más allá de la tecnología y los materiales usados en la creación de las propias salas, la esencia de la visita al cine ha sido siempre la misma: una serie de rituales de paso que preparan al espectador para experimentar el espacio donde disfrutará de la película, unos umbrales que siempre se atraviesan, independientemente de lo que se vaya a ver.

En esta instalación, intentamos replicar esa experiencia implementándola en un espacio ajardinado. Encontramos espacios umbral, que nos llevan al interior, en forma de oscuros pasillos, cerrados con telones, que sugieren esta sensación de cambio de espacio, enfatizada con distintos paviments. Dentro, el jardín, como la sala de cine, es un espacio aislado que nos dirige a observar su punto focal: la pantalla, la observación de la cual es el objetivo último de cualquier sala, con sus gradas y butacas enfocadas hacia ésta. Y al igual que se sugiere un cambio espacial en la entrada, el paradigma se repite a la salida, a la inversa, cuando abandonamos la sala y volvemos al mundo exterior.

Daniel Vázquez Malvesado

Patrocinador

EQUIPO:
Malvesado

PROCEDENCIA:
Cataluña 


Daniel Vázquez Malvesado. Barcelona. Graduado en Diseño de Interiores, por la Escola Superior de Disseny BAU, en Barcelona, con nociones de arquitectura y de Visual Merchandising, y con una fascinación particular con la arquitectura moderna de principios del siglo XX, por sus formas limpias y volúmenes puros. Siempre intenta buscar la mayor funcionalidad en sus diseños, buscando aunar función y espacio, mediante un uso de materiales en su forma mas auténtica y honesta. Buscando desafiarse, ha participado en este evento para tratar de utilizar el lenguaje del espacio interior en el exterior.